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Hola! este blog esta creado para todas aquellas personas que como yo, adoran leer hasta madrugar con la compañia de un café con leche, bienvenidos al lugar donde le doy rienda suelta a las locuras e incoherencias que habitan en mi cerebro, las compartire con ustedes para que se contagien y le pongan a sus vidas un toque de excentricidad. Les advierto que el contenido de este blog posee escenas sexuales y lenguaje del mismo índole. Asi que estan advertidos queridos lectores.




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lunes, 25 de marzo de 2013

Placeres Oscuros. Capitulo 15: La verdad de los Cullen.





Los personajes no me perteneces, son de Stephenie Meyer, pero la trama es de mi invención.
Él es el Rey de su raza, y no desea ser atado a nadie, esta dispuesto a asesinar para conservar su libertad, pero inevitablemente se verá atado a ella mediante una fuerte conexión que atenta contra sus propias leyes, y contra su rebelde alma. ¿Que hará? ¿Podrá asesinar a aquella mujer que amenaza con destruir su independencia? ¿Que incluso amenaza con acabar con su reino?

Capitulo 15: La verdad de los Cullen.

-No lo justifico, se que es un idiota.

Renesmee caminaba junto a Henry por el patio de la casa, había pasado ya una semana, y Renesmee se ejercitaba un poco después de su parto. Henry era un hombre muy caballeroso y culto, siempre iba muy limpio, y olía de maravillas, daba la sensación de que estabas a salvo con él, a pesar de su gran estatura, y su enorme cuerpo, Renesmee siempre habia pensado que Henry parecia un trabajador de construcción, de estos hombres que pasan el día levantando piedras enormes y usando su cuerpo como herramienta para el trabajo, sus músculos parecían ser duros, Renesmee nunca se habia atrevido a tocarlos, le parecia una falta de respeto, sin embargo recordo aquella vez que la habia salvado de ser atropellada por la muchedumbre borracha, y sus brazos rodeandola con delicadeza, pero sin dejar de ser firme, pudo notar tímidamente su fuerza. Henry era abogado, muy inteligente y sociable, pero no tenia el fisico de un abogado.

En un principio Henry se quejaba de que nadie le hubiera avisado del parto de Renesmee, sino hasta el día siguiente, cuando todo ya había pasado. Renesmee se sentia aliviada de que hubiera sido así  ¿como le explicaría la aparición de las divinidades? ¿Y toda la complicacion durante el parto? Habría sido un desastre que Henry presenciara aquello.
- No es justo que se crea dueño de William. – Henry se quejaba del poco tiempo que había podido compartir con el niño, al que casi consideraba su hijo, si no fuera por el padre que tenía.

- Tienes razón, pero… es su padre y…

- Eso no le da derecho a alejarlo de mí, yo también quiero pasar algún tiempo con William. Hace días que no lo veo. –le interrumpió.- cada vez que vengo a visitarlos, él se lo lleva con alguna excusa. Se que lo hace a propósito, lo sé.

Renesmee se encontraba entre la espada y la pared, si era cierto que Jacob se llevaba a Will con el todo el tiempo. Lo llevaba al patio a que tomara un poco de sol, lo llevaba con Sara para que le diera mimos de abuela, pasaba buen rato jugando con él, pues para tener solo una semana de nacido era bastante enérgico y despierto, Jacob aprovecho además para presentarlo al pueblo como su hijo y heredero, Renesmee había quedado estupefacta al oír aquello de la propia boca de Jacob, quien orgulloso relataba que desde el balcón del castillo había hablado a la multitud y como gritos de jubilo le daban la bienvenida al futuro Rey de Garnicov.- Renesmee se sacudió de la cabeza la imagen de aquella multitud adulando a su hijo, aquello le daba miedo.- Hablare con él, lo prometo, tienes toda la razón Henry, solo dame tiempo.

- ¿Por qué simplemente no se va a reinar a su castillito él solo?.
Vaaaale, Henry estaba de muy mal humor aquel día.
- Eso no solucionaría nada.

- Claro que si, nos dejaría en paz, ¿no?

- Henry, ¿que estas sugiriendo?, no puedo hacer que Jacob se aleje de Will.
- ¿Seria mucho pedir?

-¡Henry! – Renesmee estaba sorprendida.

- Vale, no te escandalices, solo bromeaba.

- Es su padre.

- No lo sabe aún, es un bebé.

- No puedo creer que me estemos hablando de esto. Pareces un niño enojado porque alguien le ha quitada su juguete. – Henry se sonrojo.- No comprendes, ¡es su hijo! y él lo ama, además no puedo explicar la conexión que existe entre Will y Jacob.
¿Como le explicaba a Henry que William ya sabia quien era Jacob en su vida, incluso antes de nacer?, lo sabia por la manera en como se agitaba en su vientre cada vez que oía la voz de Jacob, seria una crueldad alejarlo de su padre, ella nunca haría eso.

- Tu no le perteneces, tu eres libre de elegir con quien quieres estar – la miro con seriedad- ¿o es que sigues enamorada de él?

- ¡No!- soltó la cobriza, estaba enfadada y no quería que la vieran como a la pobre Renesmee, a quien Jacob vapuleaba cada vez que le daba la gana.

- ¿Entonces has pensado en mi proposición?- pregunto Henry visiblemente relajado después de aquella confesión.
Henry estaba mucho mas decidido aquella mañana, la violencia en como se expresaba, estaba dispuesto a todo.

- Si...- titubeo Renesmee, pero las cosas habían cambiado mucho, realmente ella nunca se había planteado casarse con Henry, porque ello supondría mas que darle un padre a Will, y ella no sabia si podría cumplir con los deberes de una esposa.

- ¿Y?- el no se iría sin una respuesta.

- Y aun no me decido, ¿vale?

- Renesmee.- ella se tenso, mientras Henry le tomaba las manos- Siento todo esto, es solo 
que... Todo iba tan bien, y luego apareció él.- término con amargura.

- Su aparición no ha cambiado nada, ¿de acuerdo?

- De acuerdo. – contesto Henry mas confiado.
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- ¿Piensas seguir alimentándolo tu misma?

- ¿De que estas hablando?- pregunto Renesmee sorprendida por la pregunta de Jacob, se encontraban solos en la sala de los Cullen sentados en uno de los sofás mas cómodos del hogar, ella amamantando a William, quien se notaba en estado de éxtasis mientras se alimentaba del pecho de su madre, estaba limpio y seco, y era su hora favorita del día.- ¿Por supuesto que pienso seguir haciéndolo?

- No quise ofenderte. – dijo algo alarmado.

- No me ofendí.- Sin embargo su voz sonaba un poco enfadada.

- Es solo que… - Jacob la miraba con una sonrisa tierna- es muy inusual, las mujeres normalmente contratan a una Ama de Leches. Ya sabes, porque temen perder su figura.

- Yo no. Quiero ser yo quien le de salud y amor a mi hijo.- le dijo mientras peinaba los negros y suaves cabellos de William.

- Tampoco pienso que ahora eres menos atractiva. – dijo Jacob disimuladamente arrimándose mas a donde estaba Renesmee con el bebé. – De hecho…- otro poquito más cerca. – pienso que estas mas hermosa. – termino en un susurro que hizo que a Renesmee se le erizara el bello del cuerpo. Cuando giro el rostro para verlo directamente a la cara Jacob aprovecho y le robo un beso. Le sostuvo la cara para evitar que se alejara, pero no hizo falta porque ella ni siquiera lo intento, permitió que Jacob la inundara con su sabor, él hizo un barrido con su lengua caliente por su boca, para luego separarse de ella. Fue fugaz, pero intenso.
Renesmee con los labios rojos y las mejillas encendidas lo miro con los ojos aun brillándoles.

- No vuelvas a hacer eso. – su voz sonaba dura, pero su boca parecía pedir mas. Jacob la miro, sus ojos parecían los de un león salvaje, se había desatado algo en él, ahora estaba caliente.

- No lo puedes impedir. – le sonrío con malicia. Renesmee estaba al final del sofá, con Jacob pegado totalmente a ella, mirándole con deseo, él había bajado la cabeza y comenzado a acariciar el hombro que tenia desnudo por estar amamantando a William, la acariciaba con sus labios, parecía un baile lento y sensual, comenzaba por el cuello, y bajaba hasta llegar a su hombro, ella se sentía desvalida ante el placer de aquel momento, era insólito como aquella casa llena de gente no había interrumpido la escena, o como William no había comenzado a llorar… Bueno esto último era improbable dado a que el niño parecía vivir solo para comer.

- Basta Jacob. – pero no parecía querer que parara. Renesmee arqueaba el cuello para darle más acceso, mientras Jacob sacaba su lengua para lamer tímidamente su piel.

- Dios, hueles delicioso, esa piel… - ella pudo notar como Jacob se estremecía, y verlo así hizo que lo deseara mas. Jacob metió los dedos en su cuello cabelludo y comenzó a masajearlo mientras seguía besándole.

- Todo este tiempo sin tocarte ha sido una tortura, espantoso, ha pasado mucho tiempo para nosotros Renesmee, si sabes a lo que me refiero.
¡Por dios! ¡Solo había pasado una semana de su parto y ella aun así lo deseaba!
Comenzó a mordisquearle el lóbulo de la oreja calentándolo con su calido aliento, repasaba su cuello con los dedos lentamente, para luego besarla en los labios inesperadamente, de nuevo, con pasión y dulzura, con mordiscos coquetos y sensuales, lamidas sedosas y juguetonas, definitivamente ella estaba a punto de comenzar a temblar, Jacob era un peligro para su cordura.

- Debemos regresar a casa Renesmee.- le dijo a milímetros de sus labios, y Jacob pudo apreciar como Renesmee se ponía tensa.

- Aquí estoy bien. – respondió rápidamente.

- Yo no.

- Lo siento, pero nadie te invito a quedarte. – La tierna sonrisa había desaparecido. La burbuja se había roto con aquellas simples palabras, él alejo su cabeza de la de ella para mirarla mejor a los ojos, aquellas palabras encendieron la ira en Jacob, quien no pensaba perder los estribos, pensó y se aclaro la mente, Renesmee solo estaba herida por lo que él había hecho, así que se lo tenia bien merecido.

- Renesmee, se que aun estas enojada, realmente lo siento mi amor. Estoy dispuesto a hacer lo que me pidas. Podemos volver a casa y prometo no molestarte, pero no te alejes de mí. – pidió con desesperación.

- Esto no se trata de si estoy enfadada o no, se trata de que no puedo pasarme la vida dependiendo de ti. – en ella había desaparecido por completo la pasión, ahora se veía fría y determinada.

- Tenemos un hijo, no puedes ignorar eso.

- No lo ignoro, simplemente no puede haber nada mas entre tu y yo.
La amargura comenzaba a hacer mella en él, ¿que iba a hacer sin ella?

- Dios, no puedo vivir sin ti, te amo. – Sus ojos atormentados le dolieron a Renesmee, pero ella no iba a ceder.- ¿Vas a vivir aquí para siempre? – él intentaba hacerla entrar en razón.

- Por supuesto que no. – Jacob se emociono, quizás ella solo necesitaba tiempo. Renesmee suspiro y continuo.- en cuanto me recupere totalmente comenzare a trabajar, espero conseguir rentar una casa decente en la cual criare a William, Sara y tú podrán ir a verlo cuantas veces quieran, Will podrá ir a visitarlos a ustedes también.
Ya estaba hecho, Renesmee le había cerrado la puerta en la cara a cualquier esperanza de regresar con Jacob.

- ¿Pero que has dicho?- eso no era lo que Jacob tenía en mente.

- Lo que has oído, no pretendo alejarte de William, solo quiero hacer mi vida.

- ¿Con el humano? – ¡y aaaaaahiii iba de nuevo! Jacob al ataque.

- ¿Vamos a comenzar de nuevo? ¡Jesús! ¡Dame un respiro!

- ¡Realmente lo siento! Pero no voy a permitir que ese tipo críe a mi hijo…
Will se había desprendido del seno de su madre y ahora miraba a Jacob con el seño fruncido, como si fuera una persona adulta. Jacob lo miro avergonzado, respiro hondo y decidió insistir en el tema en otro momento, tendría que ingeniárselas para que volviera a casa.

- ¿Vendrán a almorzar? – Esme entro a la sala no sin antes verificar que no interrumpía alguna conversación importante.

- Muchas gracias Esme, eres muy amable. – Le dijo Renesmee con una dulce sonrisa.- Enseguida iremos.
Cuando Esme se retiro Renesmee miro fijamente a Jacob.

- ¿Vendrás?- quiso saber ella.

- ¿Causare molestias?- pregunto Jacob con una ceja alzada.

- No molestas Jacob.- respondió con fastidio.
- ¿Estas segura? – le pregunto él cuando causalmente cruzaban la sala hacia el comedor Rosalie y Henry.

- No seas infantil, llevare a Will a la habitación, allí lo cuidara Rachel la niñera.

- Esta bien, te espero aquí.- le dijo con las manos en los bolsillos.
Una vez sentados en el modesto comedor, comparado con el del castillo del Rey a la vista de Renesmee, sin embargo sin dejar de ser hermoso, hogareño y reconfortante, los Cullen comenzaron a intercambiar palabras entre ellos como hacían siempre que se reunían. A Renesmee le encantaba contemplarlos a todos, se sentía muy cómoda en aquel entorno inundado de charlas amenas, como si fuera parte de el. Era hermoso sentirse parte de la familia.

- Espero que la comida sea de su agrado su majestad- le hablo Esme a Jacob, quien le hizo una caballerosa reverencia y una sonrisa picara tipica de un rey.

- Le aseguro que se ve deliciosa mi lady.

- ¿Como te has sentido Renesmee? – pregunto Esme preocupada por la salud de la joven, la familia durante aquella semana de recuperación había estado muy atenta a cualquier cosa que pudiera afectar la salud de Renesmee y el bebé, a veces incluso hasta exageraban, habían llegado incluso a un acuerdo, los días que Jacob no se quedaba a dormir en la casa Cullen, todos debían cumplir guardias en la noche para vigilar que nada les pasara a Renesmee y a William mientras dormían, Renesmee estaba harta de discutir con cada uno de ellos mientras se relevaban por horas, ya sabia quien iba a su cuarto a vigilar, Alice tenia el horario de 9:00 pm a 12:00 pm, Edward, de 12:00 pm a 3:00 am, Bella de 3:00 am a 6:00 am y al día siguiente le tocaba a Rosalie, Emmet y Jasper, aquello le ponía de los nervios, tanto que rogaba porque Jacob se quedara todas las noches a dormir. Aunque cuando Bella se quedaba solía acariciarle el cabello, y charlaban de cosas banales fuera la hora que estuvieran despiertas, era una costumbre muy intima y reconfortante, no sabia porque lo sentía así, pero le gustaba.

- Muy bien Esme, gracias a todos.- los miro a todos sentados al rededor de la mesa. Y era cierto, a pesar de que a veces la exasperaban, aquel amor le hacia sentir cada día mejor.

- Will ha estado bastante inquieto estos dias, ¿es eso normal?- Pregunto Bella a su marido.

- Mmmm...le dare una revisadita despues del almuerzo.- la tranquilizo él.

- Y Renesmee has adelgazado muy rápido, pienso que deberias alimentarte mas.- le dijo Bella 
mirandola con ojo crítico y preocupado a la vez.

- No te preocupes por mi Bella, estoy bien. - Pero Bella no estaba conforme con esa repuesta.

- ¿Y como esta el reino Jacob?- Emmett siempre se tomaba a la ligera el hecho de que Jacob fuera el Rey, sin embargo ello hacia que Jacob lo apreciara mas.

- Bastante agitado, el nacimieto de William los ha tomado por sorpresa, y ya sabes como son los Garnicovianos, celebran cualquier cosa que les haga feliz en Garnicov.- Jacob estaba muy entusiasmado contando aquello.- sin embargo he estado algo ocupado estos dias por los disturbios que ha habido cerca del pais. Al parecer algunos maleantes pensaron que habia abandonado el reino, y decidieron invadirnos.
Un sonido de asombro y miedo recorrio la mesa.

- No se preocupen, les he dejado bien claro que aun sigo al frente del reino y han cesado de sus intentos- el alivio los inundo. Volver a la antigua Garnicov plagada de miseria no entusiasmaba a nadie, solo con Jacob al frente del reino habia prosperidad para todos.

- ¿Como se los has dejado claro Jacob?- pregunto Emmett con una mirada cómplice- Cuando estábamos en la universidad eramos muy buenos haciendonos respetar - y solto una risotada.

- ¿Ustedes dos se conocen desde la universidad?- les pregunto Renesmee atontada.

-Pues si, Jacob no tenía muchos amigos, porque iba a ser el Rey, y eso hacia que algunas personas se sintieran intimidadas y otras lo buscaran por interes. Solia apartarse de la gente y andaba amargado todo el dia- Emmett parecia gustarle divertirse a costa de todos, y en aquel momento lo hacia a costa de Jacob quen respondio con buen humor.

- Hasta que este idiota aparecio, recuerdo que habia una fiesta y el tonto aparecio desnudo con una corona y una capa roja, tenia una copa de vino en la mano e intenteba burlarse de mi.- dijo mirandolo con sorna.
Las mujeres se escandalizaron.

- No puedo creer eso Emmett.- susurro Esme con vergüenza.

- Estuve a punto de darle una paliza, pero se veia tan ridiculo que no podia parar de reir. Con el tiempo me di cuenta que no lo había hecho con malas intenciones, simplemente se comportaba como... Emmett.- se encogio de hombros, y siguio comiendo.

- ¿Y que estudiaste en la universidad?- pregunto Renesmee muy interesada. Estaba sentada al lado de Jacob en la mesa, frente a ella se encontraba Henry quien la miro con enfado, pero Renesmee no lo vio, no parecia gustarle que tuviera tanto interés en el Rey.

- Estudie Ciencias Políticas y Militares, Economía y Derecho.- dijo como si nada.
Renesmee se quedo estupefacta, y no era la unica, la mitad de la mesa tambien.

- ¡¿Estudiaste tres carreras?!- pregunto muy impresionada.

- Si, tenía mucho tiempo libre, solo tenia que dejar de salir a emborracharme con Emmett y dedicarme a estudiar.

- Vaya. – de repente Renesmee sintió envidia, a ella le habría gustado también tener la oportunidad de estudiar.

- Si lo deseas tu también podrías estudiar lo que quieras, solo tienes que pedirlo. – Renesmee no se había dado cuenta que Jacob la estaba mirando, pues se había quedado pensativa después de oír un poco de la vida del Rey.
¿En serio Jacob le había dicho que podía estudiar?, ¿En ese mundo dominado por los hombres?, Donde no era muy bien visto que las mujeres se dedicaran a estudiar?, seria muy interesante.

- ¿De verdad?- pregunto ella sumergida en la ilusión y él abrió los labios para contestar, pero alguien los interrumpió, en seguida se rompió la burbuja en la que estaban.

- Por supuesto, si así lo quiere Renesmee, yo podría incluso ayudarle con William. – comento Bella. – pero creo que lo mas adecuado seria que recibieras clases particulares aquí, en casa.

Renesmee se tenso, no quería tocar ese tema, pero era necesario.

- Bueno, no tengo planeado aun comenzar a estudiar, William me necesita. – dijo evadiendo el tema.

- Yo podría enseñarte algunas cosas si así lo deseas, antes de decidir que quieres estudiar, debes saber algunas cosas sobre literatura, matemáticas, geografía, historia, entre otros. – propuso Edward.
Aquella idea le parecía interesante, pero no era adecuado.

- No creo que mi estadía en este reconfortante hogar me de tiempo de conocer todas esas cosas.- comento con timidez la cobriza.
Un silencio sepulcral recorrió la habitación. Bella palideció evidentemente, Edward la miraba inquieto, Jacob esperaba con ansias que dijera algo mas, Henry apretaba con fuerza los cubiertos, y el resto de la familia se removía en sus asientos con nerviosismo.

- ¿Co… como dices? – pregunto Bella intentando indagar mas sobre las decisiones que había tomado Renesmee en aquella semana, nadie sabia de sus intenciones excepto Jacob, sin embargo ni él conocía los detalles.
Renesmee se armo de valor y continuo, ella sabia que todos quería que se quedara a vivir allí, todos se lo había dejado muy claro, pero para ella no era adecuado.

- Me siento privilegiada al haberme encontrado con su generosidad, realmente es una bendición para mi haberlos conocido, aun no puedo creer la suerte que tengo, ustedes son una familia muy hermosa, y me han hecho sentir parte de ustedes, me han aceptado con mucho amor, si me dieran a elegir en cual familia habría querido nacer habría pedido nacer aquí. Pero la realidad es que no pertenezco a este lugar…- Renesmee paro abruptamente.
Había notado que Bella apretaba la mano de su marido con mucha fuerza, y lo miraba como pidiéndole algo. Edward en cambio parecía estar a punto de gritar.

- ¿Que pasa? – pregunto inocentemente la cobriza. Bella se sobresalto y la miro con determinación.

- ¿Renesmee acaso hemos hecho algo que te ha molestado? En ningún momento hemos puesto algún límite a tu estadía en esta casa cariño.- Bella apelaba a la razón de Renesmee, su sonrisa era frágil, parecía estar a punto de romperse.

- Eso lo se, pero no puedo seguir abusando de la buena fe de todos ustedes.

- En ningún momento hemos sentido eso.
Renesmee recorrió la mesa con sus ojos, y no encontró ningún tipo de incomodidad en sus caras. Todos se habían sentido muy bien con ella en casa.

- No soy ella.
Todos se habían paralizado, la confusión surgiendo en sus rostros.

- ¿Que?, ¿De que hablas cariño?- pregunto Bella nuevamente palideciendo aun mas.

- Que no soy ella… a quien les recuerdo. – dijo con el rostro encendido de vergüenza, no era justo que dijera eso, ella lo sabia, era muy desconsiderado de su parte, después de todo lo que ellos había hecho por ella, pero, ¡rayos!, como evitar decirlo, si a veces se sentían tan cercanos, y a ella le aterraba sentirse una hija mas de aquella familia, no quería establecer una conexión mas emocional con esa familia, porque sabia que le dolería mucho cuando se marchara.

- No se de que…

- No me mientan por favor. – susurro con mas vergüenza aun. – se que hubo alguien en esta familia que se marcho y eso les dolió, y ahora quieren sustituir su ausencia conmigo porque les recuerdo a ella, lo veo en sus ojos. – lo dijo mirando a cada uno de los miembros Cullen a los ojos. Todos bajaron la mirada, o la desviaron a otro lado.

- No es así cariño…- pero una vez más Bella se vio interrumpida.

- ¿Que le paso a ella? ¿Murió? – Renesmee estaba determinada a saber, sino conocía la historia detrás de los Cullen se volveria loca. Nadie hablo, Bella parecía muda…

- No – contesto Edward. – nos la robaron.

- ¡Edward! – grito Bella y comenzó a llorar, pero esta vez Edward no corrió a consolarla, mantuvo la mirada fija en Renesmee, quien se tapaba la boca por el horror de aquellas palabras, todos en la mesa estaban aun mas tensos.

- Era nuestra hija, y era especial. – su voz profunda temblaba.

- ¡Cállate! – gritaba Bella enloquecida de repente.

- Una mujer despiadada la secuestro, una mujer…- no pudo continuar.

- No es cierto, no hay nadie a la que hemos perdido Renesmee, solo son ideas…

- No le mientas Bella.- era la primera vez que Renesmee escuchaba a Edward enfadado con su mujer. La miraba duramente, y Bella parecía a punto de desmayarse, sus mejillas estaban pálidas y mojadas por las lágrimas, y se había levantado de la silla por la adrenalina, aquello la estaba matando.

- ¡Quieres que se aleje de mi!- le acuso ella mirándolo con horror.

- ¡No quiero eso! Solo quiero que entienda, recuerda que las divini…- paro abruptamente, recordando que Henry estaba en la habitación.

- Bella, esta bien, sino quieres hablar de ello lo respeto.- le dijo comprensivamente Renesmee a punto de levantarse, le dolía en el alma verla de esa manera. No tenía ni la menor idea de que podía desatar tanto dolor.

- Bella…- comenzó Edward.

- ¡Si dices una palabra más Edward Anthony Cullen te juro que te odiare el resto de mi vida! – Bella tenía las manos en puños, y el rostro endurecido.

- Esto lo hago por nosotros. – se giro hacia Renesmee y continuo. – nuestra hija fue raptada cuando tenia solo meses de vida, la mujer que lo hizo fue castigada por ello.

- ¿Por qué lo hizo?- la pregunta había escapado de los labios de Renesmee, no sabía lo que estaba causando en el corazón de los testigos de aquella conversación.
Enseguida se escucho un gemido de dolor, era Bella que se había arrojado al suelo, parecía desgarrada por el dolor, rápidamente Rosalie, Alice y Esme corrieron hasta ella para consolarla. Edward no tuvo piedad, estaba dispuesto a contar absolutamente todo.
Renesmee inconcientemente tenia la mano de Jacob sujeta, como si estuviera buscando fuerzas, ver a Bella destrozada llorando en el regazo de Esme y a Edward con la mirada vacía, mientras el resto de los Cullen dejaban entrever el dolor en sus rostros no era fácil. Jacob le respondió con un apretón suave, para hacerle saber que estaba allí.- Edward mejor paremos, ya no quiero oír mas, Bella… - pero mientras Renesmee moría por ir a consolar a Bella, Edward la mantenía clavada en la silla con su historia.

- Como dije, nuestra hija era especial. – miro disimuladamente a Henry y Renesmee comprendió que no podía profundizar en el tema. – y por esa condición esa mujer la veía como una abominación, como algo que no debía existir, esa mujer era la niñera de la casa, nunca supimos sus intenciones hasta que nos dimos cuenta que había huido con la niña, y solo nos dejo una carta donde explicaba sus motivos. Afortunadamente nos enteramos tiempo después que no le había dado tiempo de asesinar a nuestra hija, porque había muerto antes.
Bella sufrió mucho, aun sufre. - Miro a su esposa como pidiéndole perdón. - Toda la familia ha sufrido, iniciamos la búsqueda de nuestra hija en todo el país, sabíamos que aquella mujer no había salido de Garnicov porque no contaba con recursos económicos abundantes. Debía estar cerca.

Edward hablaba como si hubiera retrocedido en el tiempo, aun en la búsqueda de su amada hija.

- Recorrimos todos los lugares en los que tenia familiares, amigos, conocidos, pero no logramos nada con eso, parecía que se las hubiera tragado la tierra, Bella había enfermado gravemente producto del stress que le generaba no tener a nuestra pequeña, el desasosiego y el terror de perderla para siempre. Y entonces un día encontré a la mujer, enseguida avise a las autoridades, quienes la obligaron a hablar.- Edward tenia sus manos aferradas a un pañuelo, este parecía a punto de rasgarse. – cuando le reclame que me dijera el paradero de mi niña, solo me dijo que la había abandonado en el bosque para que muriera, porque no tenia el valor de asesinarla, ella dijo "ese monstruo merece estar en el infierno" – Edward soltó una carcajada seca y triste – la ironía de la situación, el monstruo en realidad era aquella mujer, que había logrado destruir a una familia enteramente feliz.
Cuando fui al bosque estaba temblando del terror, ya había pasado mucho tiempo desde que aquella mujer había dejado en el bosque a mi pequeña, por mi cabeza cruzaban todo tipo de ideas, perros salvajes, lobos, el frío, la lluvia, hombres desalmados, podrían hacerle mucho daño a una niña inocente e indefensa. Pero cuando llegue al lugar que había descrito la mujer descubrí que la niña no estaba.

Renesmee tenía los ojos húmedos, que historia tan terrorífica. Era tan horrible todo lo que había vivido, si a ella le pasara lo mismo con su pequeño Will, habría muerto de dolor.

- Por mucho tiempo nos mantuvimos vivos por la pura fuerza de voluntad, los días en casa eran espantosos, la desesperación hacia que me arrojara a las calles a buscar en cada rostro de bebés a mi hija, pero no lo encontré, cada día era lo mismo, nadie sabia nada, y el dolor nos consumía terriblemente. Al pasar los años habíamos logrado recuperar algo de cordura, pero ya nunca nada volvió a ser igual. No queríamos tener mas hijos, porque eso no solucionaría nada, no podíamos avanzar en nuestras vidas, porque ¿Cómo puedes pretender seguir la vida sabiendo que tu bebé esta por ahí sufriendo sin sus padres? Alice y Rosalie a pesar de que nunca lo confesaron, se abstuvieron de tener hijos, porque ellas también sentían la pérdida de nuestra niña, además que pensaba que no era correcto, ellas se solidarizaron con Bella. Sin embargo la esperanza nos mantenía vivos. Yo seguí buscando en las calles.
Años después Carlise fue a atender a una mujer que se encontraba en sus últimas horas de vida. Estaba agonizando, y rogaba por un sacerdote. El sacerdote no asistió, así que Carlise tuvo que oír los pecados de aquella mujer en su lecho de muerte. La mujer había confesado que en sus años de juventud había encontrado a una linda niña en el bosque, pero su egoísmo y vanidad no habían permitido quedársela para cuidar de ella, así que había decidido llevarla a un orfanato muy pobre del pueblo, dijo que nunca había intentado regresar ni siquiera para saber como se encontraba la pequeña. Para aquel entonces cuando había confesado este hecho a Carlise, aquella niña abandonada en el orfanato ya era una mujer.

- ¿Esta viva? – le interrumpió Renesmee totalmente conmovida por la historia, no había oído esto ultimo por las prisas de saber que aquella niña seguía viva. – ¿tienen esperanza de encontrarla entonces?
Edward había perdido de repente la mirada vacía, giro su rostro lentamente hacia ella y ahora la miraba con intensidad, al lado de Renesmee Jacob soltó un juramento de horror, pues había entendido todo.

- Ya la encontramos Renesmee.
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¡OMG! ¡Ya esta! ¡Se lo dijo!, ¡¿que hará Renesmee?! ¡Dios mío! ¡Esto esta que arde!
^_^ no se pierdan el próximo cap!
Espero les halla gustado, nos vemos pronto chicas!

2 comentarios:

  1. Oh por dios.. Es que.. ¡J O D E R! Por favor.. Una suplica casi:c Sube pronto u_u Porfavor, del que sea, pero ¡subi pronto! D: Hoy casi me da un infarto cuando vi que publicaste:c Porfavor, ah:cc

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  2. Sube caps por favor soi 100% seguidora de tu blog lo miro todos los días para ver si subes pero no... Adoro LVE PO EF etc... TODO
    Xispitas

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